AL VUELO-Inventos

Por Pegaso

Andaba yo volando allá, por la Tres Veces Heroica y una vez Satánica Ciudad de Matamoros, donde pude constatar que en realidad no hay mucha diferencia con Reynosa, puesto que basta una ligera lluvia para que en las calles se formen verdaderas lagunas y sea imposible transitar a pie o en vehículo.

De venida abordé un autobús cuyos asientos incorporan una verdadera innovación: Un cómodo descansapiés que permite un soporte adecuado de las extremidades inferiores y evita el cansancio durante los viajes prolongados.

Me dije a mí mismo: "¡Chingao, Pegaso! ¿Por qué no se les habrá ocurrido antes?"

Y es que en materia de invenciones e innovaciones nuestro país siempre ha estado a la retaguardia del resto del mundo.

Salvo la televisión a color y la píldora anticonceptiva no hay realmente inventos que tengan un impacto global.

Apenas estaba viendo una noticia en un portal acerca de un joven genio mexicano que estudia en el CBTIS 36 de Frontera, Coahuila, quien se hizo acreedor a una beca para estudiar en cualquier universidad del mundo, con todo pagado, por parte de la Organización de los Estados Americanos.

Edgar Israel Bortoni Castillo, de 18 años, es todo un cerebrito. A su corta edad domina 6 idiomas, aparte del Español: Francés, Alemán, Italiano, Portugués, Griego, Latín e Inglés.

Si hacemos caso a la crónica del portal Vanguardia.mx, Israel obtuvo una calificación casi perfecta en el concurso internacional convocado por la OEA, con 799 puntos de 800 posibles, lo que lo coloca a la altura de grandes figuras de la ciencia y la tecnología.

Más adelante el portal menciona que el concurso convocado por la organización internacional incluía también otro aspecto: La presentación de prototipos.

Israel presentó un prototipo de teletransportador "que diseñó a base de energía eléctrica, que consiste en un generador Van Der Graaf y una pila de tungsteno que él mismo diseñó, que le permitió teletransportar un objeto de metal a centímetros de distancia" (sic).

¡La verdadera noticia no era que el chavalón ganó una beca, sino que descubrió algo que las mentes más brillantes del planeta han estado buscando durante décadas!

Pronto podremos subirnos en una nave espacial, como el Capitán Kirk y el Señor Spock. En la serie Viaje a las Estrellas, el Dr. McCoy se encuentra varado en un planeta hostil. La nave Enterprise lo está orbitando, pero parece casi imposible que el buen "Huesos" se salve.

¿Qué hace Kirk entonces? Ordena al Sr. Zulu que accione el teletransportador y suba de inmediato a McCoy, quien se encuentra sólo algo magullado.

¡Sí! Gracias a Israel tendremos ya el teletransportador en nuestras manos.

Si nos escabullimos a la cantina y nuestra vieja va a buscarnos con el palote en la mano, sólo tenemos que apretar un botón y apareceremos en nuestra camita como inocentes angelitos.

Si un mojado quiere cruzarse el río sin mojarse, accionará su teletransportador portátil y aparecerá del otro lado, entre los huizaches, sin que las cámaras, drones y perros se den cuenta de su presencia.

La verdad es que hasta ahora no hay forma de hacer teletransportadores ni cosa que se le parezca. Lo más cercano es un procedimiento que desarrollan científicos japoneses llamado teletransportación cuántica.

Lo malo es que solamente se puede teletransportar información, no objetos materiales y mucho menos, seres humanos.

Ignoro cuál es el origen de la información a que hago referencia, salvo la nota periodística. Lo que sí sé es que, como Israel, hay jóvenes muy aventajados que merecen un mayor apoyo por parte de los organismos encargados de impulsar la innovación tecnológica.

Nos quedamos con el refrán estilo Pegaso: "Es necesario determinar el volumen de líquido en el que están inmersos los tubérculos". (Hay que tantearle el agua a los camotes).